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Lula sufre caída en el Palacio de Alvorada y cancela viaje a Rusia por recomendación médica

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, sufrió un traumatismo craneoencefálico tras caerse en su residencia oficial. Aunque su estado es estable, los médicos recomendaron evitar viajes largos.
EFE

El pasado sábado, 19 de octubre de 2024, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sufrió una caída en el Palacio de Alvorada que resultó en un traumatismo craneoencefálico leve. El accidente ocurrió mientras Lula se encontraba cortándose las uñas de los pies y, al levantarse, perdió el equilibrio y cayó hacia atrás, golpeándose la cabeza.

El presidente fue rápidamente trasladado al hospital Sírio-Libanês, donde se le realizaron una serie de pruebas, incluidas resonancias magnéticas, para evaluar el impacto del golpe. Según su equipo médico, liderado por el doctor Roberto Kalil Filho, Lula presentó una contusión hemorrágica traumática leve, es decir, pequeñas hemorragias internas en el cerebro, que afortunadamente no comprometen su salud de manera grave.

"Fue grave, pero no afectó ninguna parte sensible", comentó Lula sobre el incidente en una conversación telefónica con un aliado político. Los médicos recomendaron mantener al presidente bajo observación durante unos días más para descartar cualquier complicación.

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Cancelación de su viaje a Rusia

El accidente obligó al mandatario a cancelar su viaje a Kazán, Rusia, donde tenía previsto participar en la cumbre de los BRICS el pasado domingo 20 de octubre. Los médicos aconsejaron evitar vuelos largos en las primeras 24 horas tras el golpe, aunque indicaron que Lula puede retomar sus actividades cotidianas de manera progresiva. El ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, representará al presidente en la cumbre, mientras que Lula participará virtualmente en algunas de las sesiones.

Estado de salud y recuperación de Lula

A pesar del susto, el estado de salud de Lula es estable, según los informes médicos. Aunque no se requirió una intervención quirúrgica para drenar sangre, como suele hacerse en casos más graves, el presidente continuará sometiéndose a exámenes regulares para monitorear su evolución.

El presidente, que ha enfrentado diversos problemas de salud desde que asumió el cargo en enero de 2023, ha mostrado una rápida recuperación tras cada uno de ellos. En septiembre, Lula fue sometido a una cirugía de cadera y una operación estética en los párpados, ambas sin mayores complicaciones. Sin embargo, este nuevo incidente ha generado preocupación sobre su capacidad para mantener un ritmo de trabajo normal.

"Cualquier golpe en la cabeza es delicado", advirtió el doctor Kalil, quien confirmó que no se observaron hematomas visibles en la parte frontal del cráneo, donde se produjo la hemorragia interna.

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