El ex presidente Donald Trump fue herido en su oído derecho tras recibir un disparo mientras daba un discurso en un mitin en Butler, Pensilvania, el sábado. Lo que debía ser el último acto de campaña previo a la Convención Nacional Republicana se transformó en una escena de caos cuando un hombre disparó en múltiples ocasiones, causando la muerte de un espectador y del presunto atacante. El incidente, que ha sido calificado como un intento de asesinato, está siendo investigado por el FBI con la asistencia del Servicio Secreto.
Trump describió el incidente en su red social Truth Social: “Me dispararon con una bala que me atravesó la parte superior de la oreja derecha. Supe de inmediato que algo andaba mal porque oí un silbido, disparos y sentí inmediatamente que la bala me atravesaba la piel. Es increíble que un acto así pueda ocurrir en nuestro país”.
El ataque ocurrió mientras Trump mostraba una gráfica sobre cruces fronterizos. Al escuchar los disparos, se llevó la mano derecha al cuello tras ser impactado por una bala, y rápidamente los agentes de seguridad lo ocultaron detrás de un podio. Fue escoltado fuera del evento y llevado a un centro de emergencias.
El portavoz de Trump, Steven Cheung, informó que el ex presidente está siendo atendido en una instalación médica local y agradeció la rápida acción de las fuerzas del orden.
El atacante disparó desde fuera del recinto, según la policía. Los asistentes a los actos de campaña de Trump están sujetos a estrictos controles de seguridad, incluyendo detectores de metales y revisiones de pertenencias. El hecho está siendo investigado como un intento de asesinato.
Dos personas murieron en el tiroteo: un espectador y el presunto autor de los disparos. Testigos describieron la escena a NBC News, señalando que uno de los espectadores fue impactado en la cabeza y murió al instante.
El presidente Joe Biden condenó el atentado: “No hay lugar para este tipo de violencia en el país. Debemos unirnos como nación para condenarla”, dijo el mandatario, quien conversó por teléfono con Trump. El ex presidente Barack Obama también expresó su alivio de que Trump no haya resultado gravemente herido.
El hijo mayor de Trump, Donald Trump Jr., publicó en X una foto de Trump con el puño en alto y el rostro ensangrentado frente a una bandera estadounidense, destacando su lucha por salvar a Estados Unidos. Líderes mundiales, como el presidente argentino Javier Milei y el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores Josep Borrell, expresaron su horror y buenos deseos para Trump.
Patrick Schoettmer, profesor de política estadounidense de la Universidad de Seattle, comentó: “El servicio secreto no ha aportado todavía ninguna información sobre la naturaleza del ataque, por lo que todavía no tenemos ninguna idea real de cuál fue la motivación. Bien podría tratarse de un acto de violencia política, pero también podría ser un acto de una persona con problemas mentales por motivos quijotescos”.
El impacto de este incidente en la campaña está por verse. Schoettmer anticipa que podría provocar un sentimiento de enojo entre los partidarios republicanos de Trump y potencialmente influir en el discurso sobre el control de armas.