Los demócratas, preocupados por las perspectivas de reelección del presidente Biden incluso antes de su desigual desempeño en el debate del jueves, habían dado señales positivas en la campaña de este año: los candidatos al Senado del partido, y algunos candidatos vulnerables a la Cámara, en general obtienen mejores resultados en las encuestas que el debilitado presidente, es decir podían sobrevivir en la carrera.
Ahora, esos candidatos demócratas y sus asistentes están tratando de determinar si el rendimiento vacilante de Biden y su apariencia a veces desorientada han debilitado los objetivos del partido de retener el Senado y recuperar la Cámara. Ambas cámaras, con mayorías mínimas, están en juego este otoño. Las apuestas para los demócratas son altas: si el expresidente Donald Trump gana y tiene el control total del Congreso, su agenda de segundo mandato sería mucho más amplia.
"Aún estoy procesando lo que sucedió [el jueves] por la noche", dijo la representante Angie Craig, quien representa un distrito competitivo en los suburbios de Minneapolis y confiesa que "fue un debate terrible. Todos tenemos que reconocer eso".
Al preguntarle si le preocupaba que el desempeño de Biden pudiera perjudicar sus posibilidades de reelección, Craig se negó a responder y se centró en temas locales, diciendo que estaba enfocada en las inundaciones en el sur de Minnesota.
La representante Marcy Kaptur (Ohio), cuya carrera por la reelección se considera incierta, dijo que quería esperar antes de decidir si Biden necesitaba hacerse a un lado por el bien del partido. "Quiero volver y leer las respuestas de ambos candidatos a las preguntas que se hicieron. Solo quiero leer la transcripción", agregó Kaptur.
Biden contamina el paisaje
Los demócratas que enfrentan carreras difíciles saben desde hace tiempo que Biden podría disminuir su propio apoyo. Así lo aseguran los estrategas del partido, y algunos candidatos han estado trabajando para separarse del presidente. Su desempeño en el debate corre el riesgo de amplificar las preocupaciones de los votantes de que es demasiado mayor para servir y está haciendo un mal trabajo en el cargo, alertan en la interna, lo que podría contrarrestar el trabajo que los demócratas han realizado para tratar de ganar a pesar de los bajos índices de aprobación histórica de Biden.
Con los votantes cada vez más polarizados por partido político, los candidatos han sido juzgados en los últimos años más por su afiliación partidaria que por sus méritos individuales. De esta forma, ahora parece que la tendencia será alejarse del candidato mientras siguen los coletazos del debate. Esto sumado a la espera de si la directiva demócrata tomara decisión de seguir con Biden o buscar otro candidato.
