Este miércoles a las 15:00 horas, el Senado llevará a cabo una sesión clave en la que los legisladores se pronunciarán sobre las propuestas del Gobierno para llenar dos cupos de ministros titulares y uno de fiscal judicial en la Corte Suprema. Sin embargo, el proceso se encuentra envuelto en incertidumbre debido a la falta de consensos y a la crisis que enfrenta el Poder Judicial, que ha sido objeto de investigaciones éticas y penales.
El panorama es complejo. Aunque el Gobierno sigue intentando asegurar los votos necesarios, se prevé que la votación será definida por un estrecho margen. La ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago, Jessica González, ha sido la principal carta del Ejecutivo, pero su nominación ha sido rechazada por buena parte de la oposición, particularmente por la UDI. A pesar de los esfuerzos por sumar apoyos, González aún no tiene asegurados los 33 votos requeridos.
Por otro lado, la candidatura de Jorge Pizarro, ministro de la Corte de Puerto Montt para fiscal judicial, parece contar con los apoyos necesarios y será la primera en someterse a votación. En caso de que González no obtenga los votos suficientes, su derrota podría afectar la nominación de Mireya López, ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago, quien también está en la lista del Gobierno. 
Un contexto enrarecido por las acusaciones constitucionales
El ambiente político ha sido marcado por las acusaciones constitucionales en curso, que incluyen la presentación de libelos contra tres jueces de la Corte Suprema, además de la acción contra la ministra del Interior, Carolina Tohá, por parte del Partido Republicano, y el anuncio de otra acusación contra el presidente Gabriel Boric, que finalmente fue rechazada por la mayoría de los legisladores de RN.
La incertidumbre sobre el futuro de las nominaciones refleja no solo la crisis en el Poder Judicial, sino también las tensiones políticas dentro del Congreso. A pesar de las dificultades, la urgencia por llenar los cupos vacantes en la Corte Suprema es una prioridad, dada la inminente acumulación de más vacantes y la dificultad del tribunal para conformar algunas de sus salas.
