El rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC), Ignacio Sánchez, planteó fuertes criticas en torno a los efectos económicos de la gratuidad en los planteles de educación superior del país. Aseguró que ha sido muy negativa y que pone en riesgo la calidad del sistema.
En entrevista a El Mercurio, señaló que existe preocupación al interior del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (CRUCH) y del G9 y pidió a las autoridades que fijen los aranceles regulados con indicadores objetivos.
“El arancel regulado paga solo 60% en promedio del arancel real y fija un tope para los deciles superiores; además, más del 70% de los estudiantes y el 90% en los más vulnerables debe alargar sus carreras por las brechas académicas que traen”, dijo.
Carlos Williamson, rector de la U. San Sebastián, coincidió con Sánchez y aseguró que es necesario, cuanto antes, conformar el comité de expertos para hacer “un cálculo razonable” de los aranceles, que considere las diferencias entre las universidades.
Respecto a la extensión del beneficio, señaló: “Sería cosa de extender la gratuidad un año más, que se haga el cambio en la ley. Hay acuerdo de que esta modificación tiene que hacerse. Eso provocaría un alivio financiero enorme”.
En contraste a las palabras de Sánchez
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Francisco Morales, sería inaceptable que la UC encabece una arremetida contra la gratuidad.
Además, el rector de la Universidad de O’Higgins (UOH), Rafael Correa, se mostró optimista con el futuro del beneficio estudiantil estatal y piensa “que se trata de un proceso irreversible. Este gobierno y los futuros abordarán los ajustes necesarios con profesionalismo y realismo. Seguir con esta crítica dura, casi visceral, creo que no les corresponde a las universidades tradicionales”, comentó.
En entrevista a El Mercurio, expuso el caso propio de su casa de estudios: “La UOH sin gratuidad habría sido inviable. Tenemos 70% de estudiantes con gratuidad, que son casi 1.000 estudiantes. El próximo año casi vamos a doblar el número de estudiantes. El impacto que está causando la universidad en la región es extraordinario”.
En la PUC existe un déficit de 1.500 millones de pesos anuales en los últimos 3 años.