Alberto Fujimori ingresa a la clínica tras anulación de su indulto.

Exmandatario peruano, fue acusado de haber cometido crímenes de lesa humanidad durante su administración.
Ayer miércoles, la Corte Suprema de Perú decretó la anulación del indulto y una orden de captura en contra del expresidente, Alberto Fujimori. Horas más tarde ingresó en ambulancia, junto a su hijo Kenji Fujimori, a la Clínica Centenario en el distrito de Pueblo Libre, Lima; después de haber sufrido una descompensación al enterarse de la resolución.
Tras esto la Policía Judicial, con el fin de que no se frustrara su retorno a prisión, arribó al lugar para supervisar el estado de salud del exjefe de Estado.
Luego de que en julio los familiares de las víctimas de crímenes de lesa humanidad en los episodios de La Cantuta(1991) y Barrios Altos (1992) solicitaran a la justicia la revocación del indulto, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dio plazo hasta fines de octubre para que el máximo tribunal tomara las medidas.
El juez Hugo Núñez Fulca, declaró fundado el pedido de no aplicación del indulto. La resolución de la Junta Médica Penitenciaria consignó que Fujimori "padece una enfermedad no terminal grave" y que no existe la necesidad "de ponerlo en libertad".
Al respecto sus hijos Kenji y Keiko, quienes visitaron a su padre por separado dejando en claro la división que existe entre ambos, se refirieron a lo ocurrido.
"Como hijo de Alberto Fujimori es mi deber humano estar con él en sus momentos más difíciles. Hoy nuevamente estoy contigo en una ambulancia, te amo y si tengo que dar mi vida y hasta mi libertad por ti, así lo haré" dijo Kenji.
Mientras que Keiko aseguró que apelará el falló por considerarlo un acto de "persecución y ensañamiento" de sus enemigos políticos.
Por favor no me maten... pic.twitter.com/UpwFB8Hbs3
— Alberto Fujimori Fujimori (@albertofujimori) October 4, 2018