OpenAI reafirma su estructura sin fines de lucro tras críticas y presiones de Musk y exempleados

La organización detrás de ChatGPT convertirá su unidad con fines de lucro en una Corporación de Beneficio Público, reafirmando su misión original y manteniendo el control bajo su organización sin fines de lucro.
Levart_Photographer on Unsplash

OpenAI, creador del popular modelo de lenguaje ChatGPT, anunció este lunes que dará marcha atrás en su intención de convertirse en una empresa con fines de lucro tradicional. En su lugar, convertirá su división comercial en una Corporación de Beneficio Público (PBC), manteniéndola bajo el control de la organización sin fines de lucro fundada en 2015.

La decisión surge tras intensas presiones de diversos actores, incluidos exempleados, expertos en inteligencia artificial y el propio Elon Musk, quien incluso presentó una demanda legal contra OpenAI acusando a sus directivos de violar los términos fundacionales.

¿Qué implica el nuevo modelo de PBC?

La reestructuración en una PBC busca equilibrar el desarrollo tecnológico con el compromiso de beneficiar al público. Aunque esta nueva figura legal permitirá generar beneficios, la organización estará obligada por ley a priorizar su misión social junto a los intereses de sus inversores.

La misión es lo primero”, afirmó Sam Altman, CEO de OpenAI. “Creemos que esta estructura nos permite recaudar fondos sin comprometer nuestros valores”.

Inversores y metas financieras

El anuncio llega en medio de una ambiciosa ronda de financiamiento de USD 40.000 millones, liderada por SoftBank, que podría reducir su contribución si la reestructuración no se concreta antes de fin de año. Sin embargo, Altman aseguró que el plan revisado no afectará este compromiso financiero.

OpenAI espera generar USD 12.700 millones en ingresos este año, con una proyección de USD 29.400 millones para 2026, según cifras reveladas por Bloomberg.

Críticas y oposición al plan original

El proyecto inicial de convertir OpenAI en una empresa con fines de lucro generó controversia. Musk, cofundador del proyecto, calificó la transición como una traición a los principios fundacionales y solicitó frenar el proceso judicialmente. Aunque su petición fue en parte rechazada, la demanda sigue activa.

Otros críticos, como el pionero de la IA Geoffrey Hinton, también manifestaron su preocupación por la falta de equilibrio entre la comercialización y la seguridad en el desarrollo de la inteligencia artificial.

Una estructura híbrida con un objetivo claro

A pesar del giro corporativo, OpenAI mantiene su visión original: desarrollar inteligencia artificial avanzada en beneficio de la humanidad. Con la conversión a una PBC y sin renunciar al control por parte de la organización sin fines de lucro, la compañía apuesta por recaudar capital masivo sin sacrificar su misión.

Podríamos necesitar billones de dólares para cumplir nuestra visión”, advirtió Altman. La transición legal ya ha sido comunicada a las fiscalías de Delaware y California, que supervisan el proceso.

Publicidad