Por primera vez desde que Sebastián Piñera asumió la presidencia, su desaprobación superó al apoyo de la ciudadanía. La última Encuesta Cadem fue tajante: Un 44% de los encuestados tiene una evaluación negativa del segundo mandato del empresario.
La encuesta, realizada entre el 5 y el 7 de septiembre, demostró una similitud con el anterior gobierno. Michelle Bachelet, en 2014, también demoró 26 semanas en revertir sus niveles de aprobación. Además, el desplome es similar, de un 45% de rechazo frente a un 44% de aprobación.
“La caída, al igual que con Bachelet en 2014, responde a un ciclo normal. Ha sido una tendencia que no han podido revertir. El desafío del gobierno ahora es buscar cómo contener este aumento en la desaprobación”, explicó Roberto Izikson, gerente de Asunto Públicos de Cadem.
Ambas autoridades también coinciden en la percepción que tiene la gente respecto al rumbo de sus administraciones. En septiembre de su primer año, el 47% de los encuestados creía que el gobierno de Bachelet iba por “buen camino”. Exactamente ese mismo porcentaje hoy registra Sebastián Piñera.
Cabe destacar, que el primer gobierno de la ex mandataria fue el mejor aprobado por la encuesta, con un 58%.
Las razones
Los tópicos más usados por la gente para argumentar su rechazo fueron: delincuencia, reformas, promesas y empleo. A su vez, educación y economía fueron los ámbitos que los encuestados señalaron como deficientes.
“A diferencia de la aprobación, que se ve marcada por un solo tema (economía), la desaprobación del presidente tiene causas múltiples. Es una acumulación de situaciones que ha hecho que bajen las expectativas de la ciudadanía”, dijo Izikson.
Espectro político
PDI y el Registro Civil fueron las instituciones mejor evaluadas, con un 81% y 75% de aprobación, respectivamente. Por otro lado, el Banco Central, la Contraloría y el Servicio de Impuestos Internos (SII), reflejaron una caída porcentual.
Dentro de las coaliciones, la mejor evaluada fue Chile Vamos (35%), seguida por el Frente Amplio (26%).