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Corte Suprema remueve por unanimidad a Ángela Vivanco en medio de crisis institucional

La salida de la ministra Ángela Vivanco del Poder Judicial fue decidida por sus propios pares en la Corte Suprema, antes de la votación de su acusación constitucional en el Senado. Este veredicto, que no tuvo disidencias, refuerza la autoridad del máximo tribunal y su capacidad de autogestión.
OSCAR GUERRA / AGENCIAUNO

En un giro clave en la crisis institucional que enfrenta el Poder Judicial, la Corte Suprema de Chile decidió por unanimidad la remoción de la ministra Ángela Vivanco, días antes de que el Senado vote su acusación constitucional. Esta medida, interpretada por expertos como un golpe de autoridad, busca mostrar que la Corte puede resolver sus problemas internos sin necesidad de intervención de otros poderes del Estado.

La resolución fue tomada en virtud del artículo 80 de la Constitución, que permite a la Corte Suprema remover a un juez por mal comportamiento. Los 19 ministros presentes determinaron que Vivanco incurrió en conductas que comprometieron principios clave como la independencia, imparcialidad y probidad, violando así los cimientos del Estado de Derecho.

Procedimiento y argumentos de la remoción

El proceso comenzó a las 9:00 AM con los alegatos de la defensa de Vivanco, que se extendieron hasta las 11:30 AM. Tras una breve deliberación, los magistrados decidieron votar en conjunto los siete cargos presentados contra Vivanco. Al final, concluyeron que la ministra intentó tomar el control de la Tercera Sala de la Corte y que su comportamiento no era acorde a los estándares de un ministro del máximo tribunal.

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Entre las razones de su remoción, destaca la supuesta intervención en el caso Fundamenta, donde, según la acusación, Vivanco habría intentado influir en decisiones judiciales para favorecer a la inmobiliaria involucrada. Además, los chats revelados por el Ministerio Público muestran comunicaciones con el abogado Luis Hermosilla, donde coordinaban apoyos y bloqueos de ciertos candidatos a la Corte.

El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco, afirmó que Vivanco incurrió en un patrón de conducta incompatible con el cargo, ya que intentó formar redes de influencias. Este hecho, según la votación unánime, reafirma la importancia de la probidad y la independencia del Poder Judicial.

Consecuencias y próximos pasos

La decisión unánime de remover a Vivanco envía una señal clara de la Corte Suprema sobre la importancia de mantener la ética y la independencia en el Poder Judicial. El exsupremo Patricio Valdés destacó que esta medida refuerza la idea de que es la propia Corte quien debe gestionar estas situaciones y no recurrir a acusaciones constitucionales, que son de carácter político.

Por su parte, la Cámara de Diputados ya había aprobado la acusación constitucional contra Vivanco, en conjunto con la del ministro Sergio Muñoz, quienes están suspendidos y con prohibición de salir del país. El próximo martes, el Senado votará la acusación, pero expertos coinciden en que la decisión de la Corte Suprema marca un precedente.

La abogada constitucionalista Marisol Peña interpretó la decisión como una reafirmación del "sentido de cuerpo" del tribunal, mientras que Tomás Jordán, académico de la Universidad Alberto Hurtado, señaló que este veredicto refuerza la probidad y la independencia como principios fundamentales para el Poder Judicial.

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