De acuerdo a un informe realizado por la consultora IQVIA, en diciembre de 2017 se vendieron 211 mil unidades de antidepresivos. Esto equivale a 14 mil productos más que el promedio mensual según informa El Mercurio.
Según expertos, diciembre es un mes donde existe una carga mayor que en otros periodos, por el estrés de fin de año, los gastos acarreados por la celebración de navidad, año nuevo y las vacaciones. Esto ha derivado en un alza en la venta de fármacos antidepresivos y ansiolíticos.
Además, según datos de la aplicación YAPP, que ofrece la posibilidad de cotizar precios de medicamentos en distintas farmacias, la búsqueda de productos de este tipo incrementó en un 20%.
Sin embargo, el tema que más preocupa a los especialistas es la automedicación. Jorge Ochoa, psiquiatra de la Universidad San Sebastián, señala que “la gente confunde mucho la pena, la angustia o un duelo normal con cuadro depresivo”. Esto se suma lo que se suma a que las personas “se automedican con antidepresivos, pensando que se mejorarán de inmediato y sin conocer los peligros que eso conlleva”.
Por otro lado, Lister Rossel, psiquiatra de Clínica Las Condes, aseguró que en estas fechas se ven más consultas. Para la especialista, hay dos tipos de pacientes en estas fechas. “Los primeros son aquellos que presentan cuadros depresivos, por el agotamiento psíquico que tiene que ver, principalmente, con presiones de trabajo o estrés por temas financieros que se agudizan durante estas fechas”. Los segundos, quienes están viviendo transiciones en sus vidas: periodos de soledad o de duelo de un ser querido y en estos días de fiestas, donde toda la gente parece recibir amor, estos sentimientos pueden agravarse”, concluyó.