El reconocido actor Val Kilmer, famoso por su papel como Iceman en la clásica película de 1986 Top Gun, volvió a la gran pantalla en 2022 en la secuela Top Gun: Maverick, un regreso que sorprendió a muchos. Sin embargo, esta reaparición fue inusual, ya que Kilmer, de 64 años, se comunicó principalmente mediante textos en pantalla debido a las secuelas de un cáncer de garganta que le afectó la voz.
Desde que se le diagnosticó cáncer en 2015, Kilmer enfrentó tratamientos agresivos, incluyendo dos traqueotomías, múltiples cirugías, quimioterapia y radioterapia, procedimientos que, aunque salvaron su vida, dañaron su voz de forma irreversible.
Durante años, el actor mantuvo en secreto su diagnóstico y lo negó en varias ocasiones, hasta que en 2020, a través de su autobiografía I’m Your Huckleberry, compartió detalles de su batalla. En el libro, recuerda uno de los momentos críticos: “De repente, me desperté vomitando sangre… cubría la cama como en una escena de El Padrino”.
A partir de 2014, cada palabra emitida por Kilmer dependía de un aparato que convertía su voz en un sonido grave y raspado. “Echo de menos mi voz… y mi risa. Ahora me río como un pirata”, bromeó en una entrevista. A pesar de esta pérdida, el actor ha encontrado un nuevo modo de expresarse gracias a la inteligencia artificial. En colaboración con la empresa Sonantic, Kilmer desarrolló una voz digital similar a la suya, lo que le permitió comunicarse de nuevo. “Después de ser diagnosticado, mi voz me fue arrebatada… pero sigo siendo la misma persona. Ahora puedo expresarme nuevamente”, comentó.
Además, en 2021, Kilmer lanzó Val, un documental personal disponible en Prime Video, que explora su vida y su lucha contra el cáncer, incluyendo episodios emocionales como la muerte de su hermano Wesley y la pérdida de su rancho en la crisis de 2008.
Entre sus relaciones personales más significativas, destaca su vínculo con Cher, quien fue un gran apoyo para Kilmer durante los momentos más difíciles de su tratamiento. En su autobiografía, Kilmer relata un incidente en la casa de la cantante en el que comenzó a vomitar sangre. A pesar de la gravedad de la situación, ambos terminaron riendo juntos, una muestra de la conexión y el apoyo que se brindaban.