La respuesta del cerebro al estrés

Imagina que vas caminando por la calle, y a la distancia ves a un león parado bajo un árbol. El León comienza a avanzar hacia a ti. La reacción de tu cerebro ante la situación es instantánea, se activa lo que se denomina como respuesta al estrés.
Esta respuesta activará muchísimos sistemas en tu cerebro y en tu cuerpo; tu pulso cardíaco comenzará a ir en aumento, al igual que tu presión sanguínea y tus niveles de azúcar.
“Cada uno de tus sistemas se verán afectados en ese momento, en lo último que pensarás es tener sexo” menciona Alon Chen, el director de el laboratorio de neurogenetica del comportamiento , en su conferencia , La respuesta del cerebro al estrés, durante la Feria Internacional del Libro (FIL), en Guadalajara.
El estrés es una respuesta natural en situaciones frustrantes o alarmantes , y aunque nuestro organismo esté apunto de desmoronarse , la realidad es otra, ya que estas condiciones sólo son meramente medidas de supervivencia.
Pero ¿Que pasaría si nos damos cuenta que el león que se acercaba a nosotros en realidad es una persona disfrazada? Ante esta situación todas las acciones que nuestro sistema nervioso haya tomado para ayudarnos a controlar el escenario deben “relajarse” y nuestro cuerpo debe de retomar sus funciones ordinarias.
Nuestros niveles de estrés y presión deberían se reducirse pero, muchas personas no pueden estabilizar estos, y por consecuencia se comienzan a desarrollar enfermedades relacionadas al estrés.
Las condiciones de estrés , que no son controladas por nuestro sistema nervioso, pueden provocar enfermedades como: Depresión, ansiedad, Diabetes , obesidad e hipertensión.
El estrés es una condición de ambiente, depende mucho de las cosas que tengamos alrededor para que esto se presente , ciertas de estas situaciones pueden ser más susceptibles debido a la programación genética.
Además, el estrés no discrimina edades ni sexo ya que pueden padecerlo desde un adulto mayor hasta un embrión. Y en este caso quien está expuesta al estrés es la madre, pero ella puede transmitirlo al embrión, lo que se conoce como estrés temprano; esto provocará que cuando el bebé crezca sea más propenso a desarrollar desórdenes por estrés.
El doctor Alon Chen comentó que el tratamiento más efectivo para mitigar el estrés es la combinación de psicoterapia y medicamento. Pero la mejor manera de combatirlo antes de que genere padecimientos graves es haciendo ejercicio y realizando actividades que nos gusten como: salir a pasear con tu mascota, leer, escuchar música o cualquier actividad que nos relaje.